PROFEPA DA PRISIÓN A CAMPESINOS MIENTRAS ABRAZA Y PREMIA A LOS ADIENERADOS

 

Los inspectores de Profepa se enriquecen a costa del entorno natural del sur de Quintana Roo, ya que están a disposición del mejor postor, el que pague más, pues mientras humildes campesinos son encarcelados por vender 2 loros silvestres se hacen de la vista gorda por la devastación de grandes extensiones de manglar, protegido por leyes ambientales y carrizo, que casi ya no se puede observar a orillas de la laguna Bacalar, que dio origen al nombre de esa ciudad.

Los ejidatarios de Bacalar pusieron al descubierto una más de las transas de los inspectores de la Profepa, porque no es posible que una magna obra como la que se realizaba en el parque ecológico no haya tenido la visita de la a Profepa, sobre todo porque es una zona sumamente frágil por su entorno natural.

Los trabajadores barrieron con grandes extensiones de manglares y carrizo. Exactamente como sucede todos los días a orillas del Estero de Chac donde los ejidatarios desde tiempos de Ernesto Haro Gutiérrez como comisario ejidal, comenzó con la devastación natural de esa zona, cortó hectáreas de manglar, enterró grandes superficies de humedales para llegar a la orilla y poder vender esos terrenos que se adueñó.

Para comprar impunidad se alió con perversos personajes de la política como Luis Alegre quien ahora aspira a gobernador y Otoniel Segovia, entonces presidente municipal de OPB. Les regaló parte del botín, hasta los llevó en lancha para que escojan el terreno que gusten a orillas de ese ramal de agua que desemboca al río Hondo.

Los de la Profepa también tienen un terrenito en esa área, desde luego, como lo aseguran los mismos ejidatarios que conocen la ubicación del mismo. Es por eso que no procede ninguna denuncia en materia ambiental en contra de Marcos Jiménez Potenciano y Ernesto Haro Gutiérrez, a pesar que están documentadas las criminales devastaciones de manglar en esa zona, casi ya no hay. Por eso suena ridículo que encarcelen campesinos mientras siguen devastado el sur de Quintana Roo impunemente.